CAPITULO XXX

Del IRÉPENI

Echa raíz gruesa y fibrosa, tallos que arrastran por la tierra, hojas como de albahaca, medianas y nada aserradas, y flores amarillas, pequeñas y parecidas a las de los frijoles. La raíz carece de sabor y olor notables, y su polvo cura espolvoreado las úlceras tanto de los hombres como de las caballerías; las hojas machacadas y aplicadas curan los tumores. Nace en regiones frías, como es la de Pátzcuaro, en lugares abruptos y montañosos. Hay otro irépeni que nace en regiones templadas, con tallos parecidos a cañas de trigo, verdes, nudosos a trechos, hojas verdes que simulan alas de mariposas, flores pequeñas amarillas, y ramas erectas; dicen que alivia las úlceras no menos que la planta precedente.