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ÍNDICE DE ESCRITOS VARIOS
Introducción GeneralLos valores del poema latino de Francisco Hernández, por Tarsicio Herre ra ZapiénPoemas a Arias Montano, muy docto y preclaro varónAd Ariam Montanum, virum praeclarissimum atque doctissimum, carmenIntroducción, por Miguel León-PortillaAl lector, por Joaquín García PimentelProemio a Felipe II óptimo Máximo, Rey de las Españas y las IndiasDescripción general de todas las IndiasDel parto de las mujeres mexicanas y del doble baño de los niñosDel baño de las niñasDe la casa telpochcalliDe la casa calmécacDe los monasterios de las mujeresMatrimonio de los mexicanosDe las leyes del casamientoDe las mujeres y concubinas de MoteçcumaDe los herederosDe los esclavosDe la vivienda de los mexicanosDe la institución TeuhyotlDe la consagración de los reyes de la Nueva EspañaDe la muerte, de las almas y de la sepulturaDe las sepulturas de los reyes mexicanosCon qué discursos acostumbraban hablar a los dioses y a los hombresDel senado regio congregado entre los mexicanos y los tribunosQuiénes eran castigados por las leyes y de qué manera se procedía en contra de los malhechoresDe las razones para hacer la Guerra y manera de hacerlaCómo era la ciudad de México cuando al principio la ganaron los españolesCómo era la ciudad de México en el año quincuagésimo más o menos de que fue ganadaDel clima de la ciudad de MéxicoDe las cosas admirables de la Nueva EspañaDe la naturaleza, costumbres y vestidos de los mexicanosDe los vestidos y ornamentos que usaban en la guerraDe los mercadosDel uso de qué cosas conocidas en el antiguo continente carecían los mexicanos en el tiempo que se rindieron a nuestras armasQué conocimiento tenían del cielo y de los astros, y qué presagios acostumbraban tomar de los fenómenos meteorológicosDe los médicos que llaman titiciDe la comida privada del rey de su recorrido por la ciudadDe la comida pública del reyCon qué lo deleitaban a la hora de comerDel nitoteliztliDe los aviarios, jaulas y arsenales de MotecçumaDe la guardia de Motecçuma y de los tributos que se pagaban cada añoDel templo de los mexicanos y del xerolofoDe los sacerdotes mexicanosDel origen de la gente de la Nueva EspañaDe la ciudad y de los reyes de TetzcocoDe los otros reyes de Tetzcoco y de otras cosas pertenecientes a la ciudad tetzcoquenseDe otras cosas que realzan el ornamento de la ciudad tetzcocanaDel principio de los mexicanosDe los reyes mexicanosDe los reyes de TlatelolcoDe los augurios de los mexicanosDe los cinco soles o edadesDe la escritura mexicana, de la numeración y de los mesesDe los dioses mexicanosDe otros dioses y diosasOpinión de los mexicanos acerca del origen del mundo, del premio a las buenas obras y de otras cosasDe las cosas que deben tratarse después y del cúmulo de los añosDe los signos genetliacosDe la fiesta del primer mes y del segundoDe la fiesta de los meses tercero y cuartoDe la fiesta del quinto y sexto mesDel séptimo y del octavo mesDe los meses noveno, décimo y undécimoDe los meses duodécimo y decimoterceroDe los meses decimocuarto y decimoquintoDe los tres meses restantesDe las fiestas moviblesDe la astrología de los indios inventada e instituida por QuetzalcoatlDe otra muerte voluntaria de los sacerdotesDel ayuno teouacanenseDe la fiesta de QuetzalcoatlDe una gran fiesta de TexcallaDe la ciudad de TexcallaLibro de la conquista de la Nueva EspañaLos intereses filosóficos de Francisco Hernández, por Elsa Cecilia FrostDistinción de la naturalezaDe los principios de las cosas naturales{bis}. De la forma y privaciónDe la materia{bis}.De la privación, iten de la forma y materia más distinctamenteDe los principios de las cosas artificiales, de las causas de las naturales: forma, materia, eficiente y finCuántas causas pueden tener las cosas, de las causas que llaman no de por sí, y del caso y fortunaDe los monstruosDel orden de los fines y de las causasDel movimientoDe la ligereza del movimiento, la cual se toma de la proporción que hay entre las proporciones de los movedoresDe dónde se conozca la velocidad del movimiento y de dónde de la velocidad del movimiento derecho o recto y del que haze a la redonda y de la ligereza de la circuiciónDe dónde se entiende la presteza de los demás movimientosQue no se pueda señalar lo postrero del movimientoDe la generación de los movimientosDe la holganzaDel lugarDel vazíoDel tiempoDe los principios y fines de las cosas permanentes y sucesivas, y del movedor principalQue el mundo es unoQue el cielo es finitoQue no puede haver cosa fuera del cielo ni natural ni violentamenteQue el cielo ni es elemento ni se compone de elementosQue el cielo es muy excelenteQue el movimiento del cielo es perpetuo, el cual ni es animal ni natural ni violentoDel movimiento de las cosasDe los orbesDe la postura del cielo y de sus medidasDel movimiento circular de los orbesQue el cielo exercita sus fuerzas en estas cosas de acá baxoDe la lumbre de las estrellasDe la claridad del solDe los eclipses del sol y de la lunaDe los círculos del cieloDe los movimientos de los planetasDe la tierra y que ésta sea centro y punctoQue la tierra está queda, por una parte descubierta y por otra cercada de aguaQue la tierra es la más pesada de todos los elementos, y su pesadumbre de una misma especie con la gravedad del aguaDe qué manera usen los compuestos de la gravedad de la tierra, y de las demás cualidadesQue son cuatro los elementosQue cada elemento tiene dos calidadesQue las calidades son contrarias entre sí, y que fuera de las cuatro tengan también otras formales escondidasQue no dependen unas calidades de otras, que son efectos de las cualidades de la gravedad y levedad y que haya en los compuestos cualidades segundasDel calor, frialdad, humedad y sequedadQue se transmutan los elementos unos a otrosQue de la mayor o menor intensión de las cualidades se corrompen los elementosDe los elementos semejantes y desemejantesQue ninguna cosa haze efecto en lo que le es del todo semejanteQue las calidades más activas resisten menos, y más las menos activasQue sea necesario padecer las cualidades que hazen, como sea entre dos del las juntasQue la potencia proviene de la muchedumbre de la formaDe la mezcla de los elementosQue en los mixtos están las virtudes no las formas de los elementosDe una cuestión y respuestaQue se nombran los mixtos de las cualidades que tienenQue no se puede dar igualdad de cualidades en los compuestosQue de unos compuestos se engendren otrosDe muchos géneros de formasQue la forma humana sea la más excelenteDe la augmentaciónQue los vivientes constan de cuatro naturalezas y cuál sea su diversidadQue tengan las cosas que viven perpetua sucesiónQue todas las cosas fluxibles permanecen por un momento de tiempoQue lo mismo que una vez pereció no puede tornar a ser otra vezDe la virtud celeste baxaDe la materia de todas las impresionesDe los lugares en que se engendran las impresionesDe los vaporesDe las cosas que se engendran de la exhalaciónDe los cometasDe los nombres de los cometasDe la GalaxiaDe los vientosDel terremotoDel truenoDe los relámpagos y rayosDel granizoDe la nieveDel rocíoDe la heladaQue el granizo, rocío, helada y nieve no difieren en especie, y de las lluviasDe las fuentesDe los montes y del marDel fluxo de la marDe la salsura de la marDe los saboresDe la iris y coronaDe la cocciónDe los metalesDe las piedrasDel encienso y otras cosas pulverizablesDe la pudredumbre[Del ánima]Que se ha de tractar primero de los objectos que de las potencias y acciones del ánimaDe los tres géneros de animadosDel ánima vegetativa y de sus partesDel mantenimientoDel ánima sensitivaDe la vistaDel oídoDe la vozDe la orejaDel olfactoDel gusto y géneros de saboresDel toqueDel número de los sentidos particularesQue se corrompe el sentido con el exceso del sensibleQue cada uno de los sentidos apropria a sí un particular elementoQue la vista es el más excelente de los sentidos y de la excelencia de todos ellosDe los sensibles comunesDe las virtudes interiores del alma y primero del sentido comúnQue los sentidos no sienten a sí mismosDe la diferencia que hay entre el sentido común y los sentidos particularesDe la imaginación y de los sueñosDe la virtud estimativa y de la memoriaDe la excelencia de las sobredichas virtudesDe la virtud del movimientoDe las afeccionesDe otras cuatro potestades que nascen de las dichas virtudes de apetecerDel ánima racionalDe dos partes del entendimiento y primero del que llaman los philósofos pasibleDel entendimiento agenteQue el ánimo humano se conoce a sí mismoCómo entiende el ánimo las substancias apartadasDiferencia del entendimiento humano, divino y del demonioDe la voluntadDe los principios de las cosas naturales, o parte físicaSobre las causas de las cosas naturalesDel movimientoDel espacioDel vacíoDel tiempoDel segundo libro acerca del mundoDe la generación y la corrupciónDe los compuestosMeteorologíaProblemas acerca del almaDel apetito universal del bien, y diversidad de los finesQue haya un fin último de las cosas agibles, el cual es políticoQue no haya en esta ciencia demostración sino razones probables, y cuál sea el discípulo hábil para aprovecharse de semejante doctrinaEn qué consista la felicidad, y cuál sea el discípulo a quien toque oír esta doctrinaSi está la bienaventuranza en el deleite, honras y prosperidades o en la virtudQue no consiste en la ideaQue la felicidad es bastante para la vida dichosa, y que ésta es acción del entendimiento en la vida perfectaQue la felicidad consiste en los bienes del alma, y en la virtud con deleite, y cosas necesarias de la vida, como son bienes del cuerpo y fortunaQue nace la felicidad de Dios y de las acciones humanas. De donde viene que ni los brutos ni los niños pueden ser en la vida bienaventuradosQue aquel es felice que haze obras de excelente virtud, en vida perfecta, y ha de morir en igual fortunaQue toca a los defunctos la fortuna de los vivos, pero no de manera que los haga de dichosos desdichados o de desdichados felicesQue ni Dios ni la felicidad se deven propiamente loar, sino honrar, por no se poder ordenar a otra cosaQue las virtudes que están en el entendimiento se dizen intelectuales, y las que en la virtud apetitiva moralesQue las virtudes intelectivas se adquieren con doctrina, y las morales con uso no natural ni preternaturalmenteQue sea cosa conveniente inquirir cuáles sean las acciones de virtud y que son semejantes a las que suceden a la misma virtud a las que la precedieronQue la virtud y el vicio consisten en deleiteDe dos respuestas de una duda acerca de lo sobredichoQue la virtud es hábitoQue la virtud es un hábito electivo que consiste en medicina cuanto a nosotros, y considerado en sí mismo en el extremo o cumbreDe las virtudes en particularQue la virtud es contraria a los dos extremos y de otras cosas acerca destoDe qué manera nos devamos haver para conseguir el medio virtuosoCuál se diga acción voluntaria y cuál involuntaria, y si es lícito hazer fealdad por evitar la muerte o alguna grande fatigaDe la elecciónDe qué cosas se delibereCuál sea el objeto de la voluntadQue las acciones que se siguen a la consultación y elección hazen hábitos voluntariosDe la fortalezaDe la diversidad de las cosas terribles y extremos de la fortalezaDe cinco maneras de fortaleza semejantes a la verdaderaQue es mayor fortaleza sufrir y tolerar los peligros que no acometerlos, y pasar dolor que no gozoQue se llaman solamente templados los que usan bien de ciertas partes del cuerpoQué hombres devan llamarse templadosDe otras cosas tocantes a la misma templanzaDe la liberalidadDe la magnificenciaDe la magnanimidadDe cierta virtud que tiene por objeto las honras medianasDe la mansedumbreDe la afabilidadDe la virtud de la gravedadDe la buena conversaciónDe la vergüenzaDe la justiciaDe otra particular justiciaDe lo justo distributivoDe lo justo conmutativoDe la repasión, moneda y necesidadDe la injuria, justo, ciudadano, heril y económicoDel derecho natural y legítimoEn qué difiere lo injusto de la injuria y de lo justo el derechoSi puede alguno padecer injuria voluntariaDe la equidad, y bondad, y delo equo y buenoSi puede hazer alguno injuria a sí mismoDe las virtudes intelectualesDe las partes del entendimientoDel arteDe la prudenciaDel entendimiento y sabiduríaDe la sabiduríaDe la eubuliaDe la sagacidadDe la gnomeSi haze al caso la prudencia y sabiduría para la bienaventuranza(y último). De otras cuatro preguntasProblemas morales según la doctrina de AristótelesDel origen del mundoSi amor y deseo son actos contrarios de la voluntadSi puede el deseo tener por objeto lo que no existeDel amor y el deseo de lo útil, y si para practicar dignamen te la vida contemplativa con viene despreciar o renunciar a las riquezasDel amor y el deseo de las cosas deleitablesDel amor y el deseo de los bienes superioresDel amor divinoSi puede Dios ser amado, y si con el amor divino se mezcla el deseoDe la felicidadSi la felicidad consiste en amar o en conocer a DiosCuál sea una más profunda afección o alteración anímica: si el sueño, o bien el éxtasis o concentración mental intensaQué han opinado los más notables filósofos acerca de la diestra y siniestra que se atribuían al cielo como a verdadero animalDe la comunidad del amorSi los seres espirituales aman a los corpóreos, los superiores a los inferiores, y el alma al cuerpoSi hay amor en DiosSi la luz del Sol es cualidad corpórea o accidente, y acerca delos ojos y la visiónSi el amor tuvo nacimiento, y si lo amado es más digno que lo amanteCuál fue el primer amor, y cuándo nació, según el sentir de Platón, el amor intrínseco de DiosCuándo nació el amor del mundo, después del predicho intrínseco de DiosDónde nació el amorLibro único acerca de los problemas estoicosIntroducción, por Elias TrabulseProemio al lector de Pedro Moya de la IglesiaLibro primero: De los artículo de fe la ley y de la oración dominicalLibro segundo: De los siete sacramentosLibro tercero: De los mandamientos de la ley y de la oración dominicalEl manuscrito sobre el cocoliztli, por Germán Somolinos d'ArdoisDe la enfermedad de la Nueva España del año 1576 llamada por los indios cocoliztliIntroducción, por Rafael Martín del CampoDel pez que los navegantes del Océano Septentrional vulgarmente llaman pez romericoDel pez tiburónNota aclaratoria, por Martí SolerCompendio breve de la división y partes de Asia según lo antiguo y modernoIntroducciónLibro primeroLibro segundoLibro terceroLibro cuartoLibro quintoLibro sextoLibro séptimoLibro octavoLibro novenoLibro décimoLibro undécimoLibro duodécimoLibro decimoterceroLibro decimocuartoLibro decimoquintoLibro decimosextoLibro decimoséptimoLibro decimoctavoLibro decimonovenoLibro vigésimoLibro vigesimoprimeroLibro vigesimosegundoLibro vigesimoterceroLibro vigesimocuartoGrabados de la edición romana para los cuales no se encontró descripción correspondiente en la matritenseIntroducción, por Enrique BeltránFrancisco Hernández como zoólogo, por Enrique BeltránLos mamíferos, por Ticul ÁlvarezLas aves, por Miguel Álvarez del ToroLos anfibios y reptiles, por Hobart M. Smith S.Elementos para la interpretación de los artrópodos citados en el tratado cuarto, por Alfredo Barrera y Anita HoffmannComentarios sobre los animales acuáticos, por José ÁlvarezHistoria de los minerales de la Nueva España