CAPITULO XXXIX

Del segundo ACXOYÁTIC

El segundo ACXOYÁTIC, que algunos llaman tlachpahuáztic o escobas, otros tlalcócol o sea chico y ondulado por la forma de la raíz retorcida, y otros por su pequeñez pipitzáhoac o iztacpatli pipitzáhoac, es una hierba pequeña que echa raíz delgada, tres veces más gruesa, sin embargo, que los tallos, retorcida o enroscada y blanca; de ella nacen tallitos de una cuarta, delgados, en grupos de tres o cuatro y con hojas parecidas a las del abeto, de donde toma su nombre principal; flores en las puntas de los tallos dispuestas en espigas, pequeñas, delicadas, y que siendo blancas primero se convierten al fin en semillas de color pardo. La raíz, que tiene el principal uso en medicina, es de sabor un poco acre y olor nulo, y de temperamento caliente y seco en tercer grado. Medio machacada y tomada por la mañana en dosis de seis óbolos, con el estómago vacío y mezclada con alguna bebida propia para curar la indisposición, suele evacuar todos los humores y principalmente las flemas y la bilis, tanto por el conducto superior como por el inferior, sin ninguna molestia ni daño; y así, se dice que aprovecha en gran manera a los hidrópicos, asmáticos, impedidos de movimiento, adoloridos del cuerpo y tiñosos. Sea que el enfermo tenga fiebre o no, puede administrársele la raíz verde o seca, aunque es más prudente, cuando está seca, que la dosis sea un poco menor. Pero si los humores viciados que es necesario evacuar son muy abundantes, es preciso, cuando este remedio se tome, abstenerse de alimento hasta el mediodía. La misma raíz triturada, disuelta en orina humana y aplicada en gotas, cura las enfermedades de los ojos y quita las nubes. Nace en clima templado o un poco frío, como el de México, por lo que espero que, si se lleva a España la semilla y se siembra, se conservará y nacerá.

TOMO II. HISTORIA NATURAL DE LA NUEVA ESPAÑA 1