CAPITULO XV


De muchos experimentos para los meses de las mugeres, y para las enfermedades de la madre y echar las criautras del vientre o detenerlas, y para los defectos del cuero del rostro y para teñir el cabello y quitallo, y para la sarna de los animales quadrúpedos


Dízese que ti caminante que lleva ligadas consigo la atremisia y el elisphaco no sieme cansancio del camino. La simiente negra de la yerva peonia, en aguamiel, cura universalmente las enfermedades de las mugeres. La misma vitrud hay en la raíz, mueve los meses. La simiente del panaz con asenjos, los meses y los sudores, y el escordote bevido y puesto por linimento. Una dragma de verónica en tres ciarhos de vino se beve contra rodos los males de la madre, y contra los que se siguen después del parto. La achilea, puesta sobre el vientre, detiene los meses demasiados, y su cozimiemo sentándose sobre él. La simiente del beleño en vino se pone sobre las retas de las mugeres, y la raíz hecha caca.plasma en los lugares vergonzosos, y también la celidonia se pone en las retas. Aplicadas las raízes del panaz expelen las pares quando se detienen, y los parcos muenos. El mismo panaz bevido en vino purga la madre, y también aplicado con miel. La polemonia bevida en vino expele las pares, y con su olor purga la madre. El zumo de la menor centaura, dado en bevida, o aplicado en fomento, mueve los meses. También la raíz de la mayor aprovecha de las mismas maneras, en los dolores de la madre. Y raýda y aplicada expele los partos muetros. El llantén se aplica puesto en lana en el dolor de la madre, y en la sufocación della se beve. Pero el diaamo tiene en esto principal virtud. Mueve los meses, expele los partos muertos o los que vienen atravesados. Bévese un óbolo de sus hojas en agua, y es tan eficaz para estas cosas que aun no se ha de meter en el aposento de las preñadas. Y no solamente tiene virtud bevido, sino aplicado en untura o sahumerio. Tras éste aprovecha el pseudodicramo, pero mueve los meses cozido un denario de peso con vino. La aristolochia aprovecha de muchas maneras, porque mueve los meses y las pares, y expele del vientre los parcos muertos, mezclada con mitrha y pimienta, bevida o puesta abaxo. También reduze a su lugar la madre salida afuera, con su fomenro o sahumerio, o aplicándola muy sutil. El agárico, bevido cantidad de tres óbolos en un ciatho de vino, enmienda después destas yervas la sofocación y la dificultad de los meses. También el peristéreo aplicado en manteca de puerco, fresca, y el antitrhino con azeite rosado y miel. También aplicada la raíz de la nimphea thesala quita el dolor. Bevida en vino negro, restaña los profluvios de sangre. Al contrario, la raíz del ciclamino, bevida y aplicada, los mueve, y con su cozimiento cura la bexiga a los que se sientan sobre él. El cisanthemo bevido expele las pares y sana la madre. La raíz superior del xiphio mueve los meses beviendo della una dragma en vinagre. El peucedano quemado, con su olor, recrea y quita la sufocación de la madre. La zaragatona principalmente mueve los meses y el vientre, tomando una dragma en tres ciathos de aguamiel. La simiente de la mandrágora, bevida, purga la madre, y aplicado su zumo, mueve los meses y los partos muertos. Su simiente, con vino y alcrevite, restaña también los profluvios demasiados de sangre. El batrachio en la bevida, o en la comida, restaña y detiene los fluxos del vientre, fuera desto es ardiente (como diximos), cruda y cozida es loada, con sal y azeite y comino. El dauco en la bevida expele facilísimarnente los meses y las pares. El ládano cotrige la madre con su sahumerio, y estando dolorosa y exulcerada se aplica encima. La escamonia, bebida o puesta en el vientre, expele la criatura muerta. El uno y el otro hipericóo, aplicado, mueve los meses. Pero sobre todas las demás cosas (como entiende Hipócrates) el crethmos, tomando su simiente o su raíz en vino con la corteza, trae fuera también las pares y bevida en agua socorre a las sofocaciones. También la raíz del geranio particularmente conviene para las pares y para las inflamaciones de la madre. La hipuris, bevida y aplicada, purga la madre. El polígono, bevido, mueve los meses y la raíz de la altea. Las hojas del llantén los expelen, y el agárico en aguamiel. la artemisia triturada cura la madre, y aplicada con azeite de lirio o con higos o con mitrha. La raíz de la misma, bevida, de tal manera purga que expele los partos muertos. El cozimieoto de sus ramos mueve, sentándose encima, los meses y las pares, y también beviendo una dragma de sus hojas, puestas sobre el vientre, aprovechan para las mismas cosas, y mejor con harina de cevada. También el acoro es útil para las enfermedades internas de las mugeres, y la una y la otra coniza, y el crethmo y las dos anthilides son utilísimas para la madre y torcijones, y para las pares detenidas, beviéndolas en vino. La calitre cura con su fomento los lugares femíneos, quita las blancuras viciosas de la cabeza, y triturada en azeite tiñen los cabellos. El geranio bevido en vino blanco, y el hippocisto en aloque, restañan la fluxión. El hisopo mitiga las sufocaciones. La raíz de la bervena, bevida en agua, es utilísima para todos los males que vienen en el parto, o después dél. Algunos mezclan con el peucedano la simiente del ciprés molida en vino tinto. Porque la simiente de zaragatona, hervida en agua, en estando templada ablanda y mitiga todos los cotrimientos de la madre. El simphito, triturado en vino tinto, mueve los meses. La scordote, bevida, acelera los partos, tomando una dragma de su zumo en quatro ciathos de aguamiel. Las hojas del díctamo se dan estremadamente en agua. Es cosa cierta que, tomando peso de un óbolo, aunque estén muertas las criaturas en el vientre, salen luego sin daño de la parida. Semejantemente aprovecha el pseudodictamo, pero más tarde. El cidaminos, ligado al muslo; el cisanthemo, bevido; la harina de la verónica, en aguamiel. El arsenogono y theligono son yervas que tienen ubas con las flores semejantes a las de la oliva, pero más amarillas. La semilla blanca, a modo de adormidera. Con la bevida del theligono dizen que se concibe hembra. La arsenogono se diferencia della en tener la simiente como de oliva, y no en otra cosa. Con la bevida désta dizen que se engendran machos, si lo queremos creer. Otros dizen ser la una y la otra semejantes a la alvahaca. Pero que la semilla del arsenogono es doblada, semejante a testÍculos. La siempreviva, a quien llamamos digitelo, cura singularmente los males de los pechos de las mugeres. El erígero, tomado en vino paso, los haze más abundantes de leche, y el sancho cozido en fatro. Pero la yerva llamada mastos, aplicada, quita los pelos de los pechos que nacen del parto, y las manchas del rostro, y otros vicios del cuero. La genciana, la nimphea heraclia hecha linimento y la raíz del ciclamino quitan todas las manchas. Los granos de la cacalia, mezclados con cera líquida, estienden el cuero en el rostro y le desatrugan. La raíz del acoro cotrige todos sus deferos. La lisimachia enrubia el cabello. El hipericón le ennegrece, el qual se llama también corion. También la yerva ophris, semejante a la berza dentada, con dos hojas. También la polemonia cozida en azeite haze los cabellos negros. De los psilotros tratamos en los medicamentos de las mugeres: pero ya también usan dellos los hombres. Tiénese por eficacísimo el archezoste, y también el zumo del titímalo, o aplicado al sol a menudo, hecho linimento con azeite, o atrancados los pelos. La sarna de los animales quadrúpedes sana el hisopo con azeite, y particularmente la sideritis las esquilencias de los puercos. Pero demos también los demás géneros de yervas.


EL INTERPRETE

1(Barrachio). Ranochia.

TOMO Va. HISTORIA NATURAL DE CAYO PLINIO SEGUNDO 2a