CAPITULO XVIII


Del pico marcio o relincho


Hay también, entre las pequeñas aves, algunas de uñas prisueñas, como son los picos, notables por el renombre que tienen de marcios, y de grande significación en los agüeros. Desta especie son los que horadan los árboles. Suben por ellos enhiestos, como salamanquesas,1 y estando ansí, entienden por el sonido que haze la corteza, cuando la pican, estar debaxo aquello de que se mantienen. Solos éstas entre las aves crían sus hijos en los huecos de los árboles.2 Créese vulgarmente que hazen con cierta hierba caer las cuñas o clavos con que los pastores les suelen atapar sus agujeros.


Cuenta Trebio que cualquier clavo o cuña, hincada cuan fuertemente fuere posible en el árbol donde tiene sus nidos, se cae luego haziendo sonido, como se asienten sobre ella. Son principales en Italia, en los agüeros, desde aquel rey de quien tomaron el nombre.a No puedo dexar de contar un pronóstico que se tomó dellos, y fue que se asentó uno sobre la cabeza’ de Quinto Tuberón, pretor de la ciudad, que estava en la plaza juzgando pro tribunali, tan sosegadamente, que le pudieron asir la mano, con lo cual declararon los adivinos significarse destruición del Romano Imperio si libremente le soltasen y, si le matavan, muerte del pretor y entonces le mató y no mucho después se cumplió lo adivinado.


Comen también vellotas y manzanas muchas aves en aqueste género,3 pero no más de aquellas que no viven de sola carne, sacando el milano,4 lo cual es en los agüeros de indicio cruel.





a. Pico marcio, por Anca Marcio, rey de Roma, 640-616 a. C.



EL INTERPRETE


De tres géneros de picos o pitos haze mención Aristóteles en el capítulo LX del libro nono De los animales: uno mayor y otro menor que mirla, los cuales vemos muchas vezes pintados de blanco y negro, y otro poco menor que una gallina y de color negro, aún más ordinario en Hespaña. Llamamos también pico verde entre nosotros otro, fuera déstos, de que el mismo autor hizo mención entre las aves lignipetas, que horadan los árboles buscando su mantenimiento, y ansí se sustentan de los gusanillos que escondidos hallan, llamándole ολιός, y dize ser todo verde, horadador de los árboles, y que por la mayor parte vive como los picos suelen hazerlo en ellos; de tamaño de tórtola, grande voz y habitador, según gran parte, de la Morea. Otro se ve, ceniziento, tenido por la sitta de Aristóteles, y otro que tomó su nombre de las paredes y muros do se sustenta, gateando por ellos, como los picos verdaderos por los árboles. Y aún otro que cuelga déstos su nido como una cestica, por lo cual le llama Plinio nidum suum suspendentem, y quiere que difiera de galbula o icteros, que llamamos en España oropéndola, aunque a algunos autores ha parecido que sean una misma ave, y aun hay quien diga que el chlorio de Aristóteles es este pico, y quien, por el contrario, afirme que no, sino el gálgulos o galbula, que cerca de Oppiano y Plinio se llama icteros. Y aun confunden el chloris con el chlorion, como el chloris antes será el verdón nuestro, o el verdezillo que algunos modernos llaman citrinella.


1(Como salamanquesas). Aunque sea verdad que los gatos suben boca arriba y derechos por los maderos, y otras cosas enhiestas de que ellos se pueden bien asir y agarrar, pero trasladamos salamanquesas, leyendo stellionum (las cuales en otras partes tenemos mostrado serlo), lo uno, porque los gatos no viven ordinariamente en los árboles como estos picos y salamanquesas lo hazen, y, lo otro, porque Aristóteles, a quien en la narración De los animales sigue nuestro autor, en el libro nono no dize fellium modo, sino stellionum modo. 2(De los árboles). Porque leo arborum y no avium, porque de otra manera fuera lo que dize Plinio contra lo que ordinariamente vemos. 3(En este género). Es necesario que entienda de las aves de rapiña, de que antes havía hablado. 4(Sacando el milano). El cual, puesto caso que viva de sola carne, come algunas vezes vellotas y manzanas, lo cual amenaza cuándo acontecen crueles sucesos.

TOMO V. HISTORIA NATURAL DE CAYO PLINIO SEGUNDO 2