CAPITULO LXI


De los dátiles marinos y de sus milagros


Son del género de las conchas los dedos marinos, los cuales se llaman ansí por la semejanza que tienen con las uñas de los hombres. Esles proprio luzir en la obscuridad y sin lumbre, con natural resplandor que tienen, y jugar en la boca de quien los come y relumbrar también en las manos, su suelo y vestiduras, cayendo en estas partes alguna gota, tanto más cuanto tienen más liquor.


De manera que, sin dubda, paresce tener su zumo la misma naturaleza que nos pone admiración en el cuerpo deste pescado.



EL INTERPRETE


Llaman estos pescados los griegos solenes, y llaman los españoles uñas marinas y longarones. Hay dos especies dellos acerca de nuestro autor, machos y hembras. A los machos llama aulos y donacas, y onychas las hembras. Es el macho del género de los testáceos de conchas largas, las cuales son dos, lisas y delgadas, y atadas por sola la una parte con una atadura negra, aunque lo escrive al contrario Aristóteles.


Son de tamaño de 12 dedos, grueso de uno y cóncavos a manera de caña, con sus dos extremos siempre abiertos. Por el delantero saca la cabeza y la mete como la tortuga. Y tiene su carne estendida según la longinad de su cobertor, el cual es de color verdinegro con unas líneas atravesadas. Por la parte que se ata es más grueso, y por las otras partes se acaba en más delgada substancia, como los mexillones. Viven de agua y arena y zambúllense huyendo cuando sienten ruido. Son de mal sueco y pegajoso, y cómense con sal y vinagre para que no hagan tanto daño, y con todo esto dizen Atheneo y Plinio ser buenos para los que tienen piedra.


La hembra, que dixe llamar Plinio onycha, difiere de los machos en color, sabor y grandeza y en el resto son semejantes. Su concha no tiene líneas verdinegras, y por eso dize Plinio ser de un solo color. Su carne es más dulce y su tamaño menor; havemos visto las unas y los otros según que los damos pintados.

TOMO V. HISTORIA NATURAL DE CAYO PLINIO SEGUNDO 2