CAPITULO XXI

De la vista

Exemplos hay innumerables de la vista. Cicerón afirma haverse encerrado la Ilíada de Homero, escripta en pergamino, en espacio de una nuez.

El mismo dize que huvo quien alcanzava a ver 135 mil pasos. Su nombre expresó Marco Varrón llamándole Strabón; y dize que solía éste, en tiempo de la guerra africana, dezir desde Lilibes, promontorio de Sicilia, saliendo el armada del puerto de Carthago, hasta el número de los navíos. Callícrates esculpió en marfil hormigas y otros animales tan pequeños que no havía hombre, si no era él, que pudiese con la vista determinar sus partes. Un Myrmecides fue señalado en este arte, el cual hizo de la misma materia un carro de cuatro cavallos que le cubriera una mosca con las alas, y una nao a quien ocultara un aveja con las suyas.


EL INTERPRETE

Como sea común a los animales la virtud vital, natural y animal, y a ésta pertenezcan los sentidos interiores y exteriores, y déstos el más material sea el toque, después el gusto, menos el odorato y los más spirituales, vista y oído y, déstos, la vista, cuyo elemento más proprio es el agua, queriendo Plinio tractar de hombres en algunos dellos notables comienza de la vista. Esta tiene necesidad de: medio alumbrado, que es el aire; obiecto o color, que se comunica a los ojos mediante su especie; órgano, que es el ojo, y principalmente el humor christalino y virtud visiva, que viene del cerebro por los nervios ópticos. Las cuales cosas, por no pertenecer a esta historia, dexaremos para sus convenientes lugares. Aunque se pudieran tractar acerca de él las otras muy sabrosas de entender, y en su determinación no pocas muy delicadas y verisímiles opiniones de philósophos.

TOMO IV. HISTORIA NATURAL DE CAYO PLINIO SEGUNDO 1