CAPÍTULO VIII


De la sagacidad


La sagacidad, a quien es contraria la rudeza o hebetud, no es ciencia, porque si se discurre por cada una de las artes, no se hallará ser geometría ni arithmética, ni natural, ni tampoco opinión, pues de otra manera todos seríamos sagaces, como no haya nadie que no tenga alguna opinión. Y es muy semejante a la prudencia, exercitándose ambas a dos acerca de unas mismas cosas, pero manda la prudencia que se haga lo que sagazmente se juzgó. Porque halla la eubulia consultando, juzga la sagacidad y manda la prudencia lo que se ha juzgado bien referirse a la acción.

TOMO VI.

ESCRITOS VARIOS