CAPÍTULO XV


Del rocío


Házese el rocío también de vapor húmido, y algo más frío y terrestre que aquel de que se haze la lluvia, porque sube menos y apenas evapora con el grande calor del estío, contradiziéndolo el frío de las noches. Hállanse diversos sabores en el rocío, porque ya se halla dulce, ya más á{ze}do, y son en tanta manera como superfluidades de la tierra y plantas, que gustarlos es muchas vezes cosa mortífera. Éste cayéndose, da materia a los gusanos y arma contra las hojas. Significa el rocío serenidad, porque estando el cielo lleno de nubes apenas acontece caer rocío y también los grandes vientos llevan la materia que se exhala a diversas partes, y la convierten en aire.

TOMO VI.

ESCRITOS VARIOS