CAPITULO XV

De la templanza del hierro y de los medicamentos que se hazen dél, y del orín y moho y escama del hierro y hygremplasto

El hierro encendido con el fuego, si no se endurece con golpes, se corrompe: el que está colorado no está dispuesto para batirse ni ames que empiece a blanquear. Untado con vinagre o con alumbre se haze semejante al cobre. Líbrase del orín con albayalde y yeso y pez líquida. Esta es una mixtura para el hierro llamada de los griegos antipathía. Algunos dizen que esto se haze también con cierra religión. Y que se halla aora una cadena junto al río Eufrates, en una ciudad llamada Zeugma, con la qual Alexandro Magno ató allí una puente de la quallos eslavones o anillos que se han reparado padecen orín, y los primeros carecen dél. La medicina del hierro, fuera de cortar, es también otra. Porque haziendo al rededor del cuerpo un círculo o trayendo tres vezes la punta de un cuchillo al rededor de las personas grandes y de los niños,1 aprovecha contra los medicamentos dañosos, y hincando en la puerta clavos quitados de un sepulchro, contra las fantasías nocturnas, y punzarse ligeramente con la punta de un cuchillo con que haya sido herido algún hombre, contra los dolores de los lados y de los pechos, que vienen súbitamente con puntura. Algunos males se sanan cauterizando con hierro, y particularmente la mordedura de perro rabioso, porque también estando en su vigor la enfermedad y con temor espantándose del agua, cauterizando la llaga quedan luego libres. También se calienta en agua con hierro encendido, en muchas enfermedades y particularmente en las disenterías. También el mismo moho2 se cuenta entre los remedios: y así dizen haver sanado Achiles a Telepho, y esto hizo o con una punta de cobre o de hierro. Porque es cierto que se pinta así haciendo caer della el moho con un cuchillo. Pero el moho del hierro se rae de clavos viejos estando el hierro húmedo. Su virtud es ligar, secar y restingir. Hecho linimento, enmienda la pelona. Usan dello cambién para las asperezas de los párpados de los ojos y para las postillas de todo el cuerpo, mezclado con cera y azeite de arrayhán y, para las erisipelas, con vinagre. También para la sarna, panarizos de los dedos y levantamiento del cuero o carne crecida al rededor de las uñas, aplicado en pañicos de lino. Restaña también los profluvios de sangre de las mugeres, aplicado en unas lanas. También aprovecha a las llagas frescas, desatado en vino y encorporado con mirra, y a las llagas del asiento, desatado con vinagre. También mitiga la gota de los pies, aplicado en linimento. También la escama del hierro, del corte o astas, se usa en medicamentos, con efeto muy semejante, pero con más vigor que el moho: por lo qual se aplica contra las lágrimas de los ojos y restaña la sangre, y principalmente quando las heridas se han hecho con hierro. También restaña los profluvios de las mugeres. También se pone sobre los males del bazo. Refrena las almorranas y las llagas que van cundiendo. Aprovecha también a las palpebras, esparcida poco a poco a manera de harina. Pero su principal alabanza es en el hygremplasto, para limpiar las heridas y fístulas y roer y consumir todos los callos y rehazer las carnes sobre los huesos raydos. Compónese desta manera: dos óbolos de greda cimolia, seys dragmas de cobre, otras tantas de escama de hierro, otras tantas de cera y un sextario de azeite. A esto se añade cerato, quando se han de limpiar o encarnar las heridas.

EL INTERPRETE

1(Y de los niños). Cosa vana y ridícula. 2(El mismo moho). Dioscórides, lib. 5, cap. 52; Mathiolo, en el mismo.