CAPITULO X


De las diferencias de nitro y de sus confecturas y medicinas y observaciones


No se deve diferir la naturaleza del nitro, no muy distante de la sal, y por eso se ha de tratar della con más diligencia, porque es claro que los médicos que escrivieron dello ignoraron su naturaleza, y ninguno la escrivi6 con más diligencia que Teophrasto. Házese poco acerca de los medos, encaneciendo con la sequedad los valles, a lo qual llaman halmirhaga. Y menos en Tracia, junto a los Philipos, sórdido y impuro con la tierra, a lo qual llaman agrio, porque de encima quemada nunca se ha hecho mucho, y ya ha largo tiempo que se dexó de todo punto. Aguas nitrosas en muchas partes se hallan, pero no tienen fuerza de espesarse. Haylo bonísimo y copioso en Clite de Macedonia, a lo qual llaman chalástrico; es blanco y limpio, muy cercano a sal. Hay allí un lago nitroso, y de enmedio dél sale una fuentezilla dulce. Allí se haze nitro, cerca del nacimiento de la Canícula, nueve días, y otros tantos cesa, y después torna a nadar encima y después cesa de todo punto. Con lo qual se muestra ser la naturaleza del suelo la que lo engendra y que, pues cesa, ni aprovechan cosa los soles ni las lluvias. También es cosa admirable ésta, que manando siempre el caño de aquella fuentecica, ni se aumenta el lago ni corre fuera dél agua alguna. Pero en aquellos días en que se engendra el nitro, si caen lluvias hazen el nitro más salado. Y si soplan vientos de aquilón, lo hazen peor, porque mueven con más violencia el cieno y esto también nace. En Egipto se haze mucho más abundantemente, pero peor, porque es fusca y pedregoso. Házese casi de la misma manera que la sal, sino que en las salinas meten agua del mar y en los nitrales del Nilo. Quando sale el Nilo se secan y, recogiéndose apartado dellas, se humedecen con el jugo del nitro quarenta días conrinuos, y no en unos mismos determinados cada año (como en Macedonia); también, si huviere lluvias, añaden menos agua del río, y luego, como se ha comenzado a condensar, se coge, porque no se resuelva y embeva en los nitrales. Así también interviene en ello naturaleza de azeite, útil para la sarna de los animales. Pero, guardado el nitro en montones, dura. Es cosa admirable que en el lago Ascanio, y en algunas fuentes cerca de Chálcida, las aguas de encima son dulces y se beven y las de abaxo son nitrosas. En el nitro es lo mejor lo delgadísirno, y por esta causa es mejor la espuma. Pero para algunas cosas haze ventaja lo grueso y sórdido, como para teñir las púrpuras y para todas las tinturas. Grande es también el uso del nitro, el qua! se dirá en su lugar. Tienen excelentes nitrerías los egipcios. Porque solamente solía haverlas junto a Naucrati y Memphis; junto a Memphis eran las peores, porque allí en los montones se haze piedra y por esta causa hay muchos túmulos de mármol. Déstos bazen vasos y muchas vezes, liquado con azufre, lo cuezen con carbones. Y también para aquellas cosas que quieren añejar usan de aquel nitro. Hay allí nitrerías en las quales sale también el nitro roxo del color de la tierra. La espuma del nitro, la quales grandemente loada, negavan los antiguos poderse hazer, si no era quando cayese el rozío estando preñadas las nitrerías, pero que aún no huviesen parido. Y así, aunque cayese rozío, no hazerse siendo incitadas. Otros entendieron engendrarse la cubierta o tela de encima con levadura. Pero los médicos desta próxima edad dizen que, en Asía, se coge el afronitro, distilándose en cuevas húmedas, y llaman a aquellas cuevas cólicas; después lo secan al sol. Tienen por mejor el lidio. Es su prueva que de ninguna manera sea pesado, y que facillsimamente se desmenuce y muela, de color casi purpúreo. Esto se trae en pastillas. Lo de Egipto en vasos empegados, porque no se ponga líquido. Y también aquellos vasos, secándose al sol, se perficionan. La prueva del nitro es que sea sutilísimo y muy espongioso y hueco. Adultérase en Egipto con cal; conócese con el gusto, porque el sincero fácilmente se resuelve y el adulterado punza. Roziado con cal, despide un olor vehemente. Quémase cubierto en una olla, porque no salte; después no salta el nitro al fuego, no engendra ni sustenta cosa alguna, siendo cierto que en las salinas se engendran yervas y en el mar tantos animales, solamente se engendran ovas. Pero tener el nitro mayor acrimonia se muestra no sólo por esta razón y argumento, sino porque las nitrerías consumen luego el calzado; por otra parte son saludables y útiles a la claridad de los ojos. En las nitrerías no da ceguera. Y los que van a ellas con llagas, en brevísimo tiempo sanan; las que se hazen allí, tarde. El nitro mueve sudor a los que se untan con ello, mezclado con azeite, y ablanda el cuerpo. En el pan usan, en lugar de sal, del chalástreo, y para los rábanos del Egipcio: házelos más tiernos, pero baze los manjares blancos y peores y las legumbres más verdes. En uso de medicina, calienta, adelgaza, muerde, espesa, seca y llaga. Es útil para aquellas cosas que se quieren llamar afuera o resolverlas o morderlas blandamente o adelgazarlas, como en las ampollas y pústulas. Algunos, para este efeto, lo encienden y después lo apagan en vino austero, y así triturado lo usan en los baños, sin azeite. Restaña los demasiados sudores, con lirio seco y mezclado azeite verde. También adelgaza las cicatrices de los ojos y las asperezas de los párpados, hecho linimento con higos o cozido en vino paso, hasta gastar la mitad. También aprovecha contra la argema de los ojos. Cozido el nitro con vino paso, en una cáscara de granada, ayuda contra los males de las uñas. Y hecho untura con miel, ayuda la claridad de la vista. Desatado en vino aprovecha para el dolor de los dientes, si se enjaguan con pimienta. También, cozido con puerro. Quemado, fricando con ello los dientes que están negros, los reduze a su color. Hecho linimento con tierra samia en azeite, mata los animales y liendres de la cabeza. Liquado con vino se infunde en las orejas que tienen materia. Y desatado en vinagre rae las sardes y inmundicias de la misma parte. Aplicado seco resuelve el sonido y zumbido de los oídos. Hecho linimento, con greda cimolia y otra tanta cantidad de vinagre, y aplicado estando al sol, quita las pecas blancas. Mezclado con resina seca los diviesos, o mezclado con ubas pasas blancas, trituradas juntamente con sus granillos. Ocurre a la inflamación de los testÍculos. También a las salidas de flegma por todo el cuerpo, mezclado con enjundia. También, añadiendo con ello resina, se haze con vinagre linimento para usarle en los principios contra las mordeduras de perro. Así también se aplica con cal en vinagre para las mordeduras de serpientes y para las phagedenas y llagas que van cundiendo o se podrecen. Molido con higos se da y se aplica por linimento a los hidrópicos. También resuelve los torcijones si se beve peso de una dragma, cozido con ruda o eneldo o comino. Desatado con azeite y vinagre repara los cansancios de los que se untan con ello. Y aprovecha contra los fríos y horrores, mezclado con azeite y fricando con ello los pies y las manos. También apaga la comezón de los que tienen cólera derramada por el cuero, mayormente dado con vinagre. También, bevido en posca, socorre contra los venenos de los hongos, y bevido en agua, si se huvieren tragado el bupreste, mueve bómiros. Dase con laser a los que huvieren bevido sangre de roro. También sana las exulceraciones del rostro, mezclado con miel y leche de vacas. Y, tostado hasta que negrea y triturado, se aplica en linimento a las quemaduras. Infúndese para los dolores del vientre y de los riñones y para el rigor de los cuerpos y para los dolores de nervios. Mezclado con pan se pone, para la perlesía, en la lengua. Y en ptisana se toma para los suspiriosos. Mezclada su flor y gálvano con resina terebintina, igual peso de todos, sana la ros antigua, tomando cantidad de una hava. Cuézese y después, mezclado con pez líquida, se da a sorber a los que padecen esquilencia. Su flor, desatada con azeite ciprino, es provechosa para los dolores de los artejos estando al sol. Y bevida en vino quita también la hictericia, y resuelve la ventosidad. Y atrayendo por las narizes su vapor echado en agua hirviendo, detiene la sangre de narizes. Mezclado con alumbre quita la comezón y desatado en agua, fomentando con ello cada día, quita el mal olor de debaxo de los brazos. Mezclado con cera, sana las llagas nacidas de flegma. Y también aprovecha a los nervios en los males deste humor. Infúndese para las celiacas. Muchos autores mandaron untar con nitro y azeite antes de las accesiones frías. Así también aprovecha, contra las lepras y manchas del cuerpo, usar en los baños de asiento de nitro; aprovecha para los que tienen gota en los pies y para los que padecen atrophias, opistótonos y tétanos. La sal nitro, cozida con azufre, se conviene en piedra.

TOMO Va. HISTORIA NATURAL DE CAYO PLINIO SEGUNDO 2a