CAPITULO XIV

Para curar los males de las mugeres y hazer que lleguen a maduración los conceptos

En los males de las mugeres aprovechan las telas o pares del parro de las ovejas, como diximos en las cabras. También el estiércodel ganado ovejuno haze el mismo efecto. El sahumerio de langostas aprovecha mucho a las estangurrias, principalmente de las mugeres. Si luego en concibiendo come la muger turmillas de pollos gallos, dizen que se engendran en el vientre hijos machos. La ceniza de los erizos, bevida, haze retener los partos concebidos; madúralos bever leche de perra. La membrana de las pares de perras, si no toca a la tierra, expele la criatura. La bevida de leche ayuda a los lomos de las que paren. El estiércol de ratones, desatado en agua llovida, repara los pechos de las mugeres hinchados después de paridas. Untando el vientre con ceniza de erizos, desatada con azeyte, conserva los partos sin aborto. Paren más fácilmente las que han bevido estiércol de ansar con dos ciathos de agua o las aguas que salen de la bexiga de la comadreja por el genital. Los gusanos de tierra hechos linimento en las cervizes y espaldas, hazen que no duelan los nervios. Bevidos en vino paso, hazen expeler las pares. Los mismos, aplicados solos por sí, cuecen las supuraciones de los pechos y las abren y sacan la materia, y las sanan hasta cicatrizarlas. Bevidos con vino mulso atraen leche. Hállanse también en la grama unos gusanillos que, ligados al cuello, afirman y contienen en el vientre la criatura. Pero quítanse quando quiere parir, porque de otra suerte no lo permiten. También se ha de tener cuidado de no ponerlos en tierra. También por causa de concebir se dan cinco o siete en la bevida. Los caracoles tomados en la comida aceleran el parto, y también la concepción, puestos sobre el vientre con azafrán. Los mismos, hechos linimento con almidón y tragacambo, restañan el profluvio de sangre.1 También aprovechan a las purgaciones tomados en la comida, y mezclados con tuétanos de ciervo corrigen la sufocación de la madre; de suerte que a un caracol se añada peso de un denario de médula y de cypero. También resuelven las inflaciones de la madre, sacados de las conchas y triturados con azeite rosado. Para estas cosa se eligen principalmente los a tipaleycos. De otra manera tómanse dos de los caracoles africanos, triturados con tanto fenugreco quanto se pueda asir con tres dedos y añadidos quatro coclearios de miel, se aplican por linimento a la boca de la madre, haviéndose untado primero con zumo de licio. Hay también unos caracoles menudos, largos y blancos, que a cada paso se hallan. Estos, secos en unas tejas al sol y molidos hechos harina, se mezclan con harina de havas por iguales panes y dan al cuerpo blancura y lisa y hermosa tez. Los caracoles menudos y anchos, con polenta, quitan el deseo de rascarse. Si la muger preñada pasare sobre una vívora, mal parirá. También si pasare sobre una anfisbena, sólo que esté muerta. Pero las que tienen una viva encerrada en un vaso, pasan sin peligro, y aunque esté muerta, y si se guarda viva o muerta haze los partos fáciles. Cosa admirable, que si la preñada pasa sobre la que no está guardada no daña, si luego pasa sobre la guardada. El sahumerio de la culebra seca ayuda las evacuaciones del menstruo. La túnica o despojo antiguo de la culebra, ligado a los lomos, haze más fáciles los partos; y en haviendo parido se ha de quitar luego al momento. También la dan a bevec en vino con incienso: tomada de otra manera haze mal parir. El váculo con que a la culebra la hizieron soltar de la boca la rana, ayuda a las que paren; la ceniza de los trixales, hecha linimento con miel, las purgaciones. También la araña, que baxa el hilo desde lo aleo, se debe asir en el hueco de la mano, y tricurada aplicarla: y si se ase quando torna a subir, detendrá las purgaciones. La piedra aetites,2 hallada en el nido del águila, conserva el parto concra todas las insidias de los abortos. La pluma de abestruz, puesta debaxo de los pies, ayuda a las que están de parto. Es cierto que se deven guardar las preñadas del huevo de cuervo, porque pasando sobre él haze peligrosos abortos. El estiércol de gavilán, bevido en vino mulso, parece hazer fecundas las mugeres. La enjundia del ansar o del cisne ablanda las durezas de la madre y los apostemas o rumores. La enjundia de ansar, con azeite rosado y arañas,3 conserva en su ser las tetas después del parto. Los phriges y licaones hallaron ser útil, para los pechos que padecen después de los partos, la enjundia del ótide, y ponen por linimento a las que padecen sufocaciones de la madre cucarazas. La ceniza de los cascarones de huevos de perdiz, mezclada con cadmia y cera, conserva las tecas firmes y sin rugas, y entienden que, rodeadas tres vezes con un huevo de perdiz, no se caen ni inclinan hazia abaxo, y si escos mismos huevos se sorben, hazen fecundidad y abundancia de leche. Y que, untadas las tetas con enjundia de ansar, se desminuyen sus dolores y, si se tritura con ceniza,4 se rompen con su untura las molas del útero y se mitiga la sarna de la madre. La sangre de los murciélagos tiene virtud de medicamento psilotro;5 pero, aplicado por linimento a las mexillas de los muchachos, no aprovecha suficientemente si no se echa después simiente de oruga o de cicuta, porque, así, o de todo punto se quitan los pelos o no salen sino como vello. Los mismos entienden que su cerebro haze también el mismo efeto. Pero este cerebro se halla de dos maneras: rojo y blanco. Algunos mezclan su sangre y hígado. Algunos cuecen una vívora en tres héminas de azeyte y, quitados sus huesos, usan dello en lugar de psilotro, haviendo primero arrancado los pelos que no quieren que renazcan. La hiel del erizo es psilocro, y se usa mezclada con el cerebro de murciélago y leche de cabra. Y también aplicada la ceniza por sí con leche de perra del primer parto, arrancados los pelos que no quieren que tornen a nacer o untadas las partes adonde aún no han salido, no nacen. El mismo efeto dizen que haze unrando con la sangre del rezno ricino o garrapata, arrancado del perro, y también con la sangre o hiel de golondrinas.

EL INTERPRETE

1(El profluvio de sangre). El comer caracoles despierta la Venus. 2(La piedra aetites). Detiene el parto ligada al brazo y le acelera ligada a la pierna. 3(Con azeite rosado y arañas). Otros leen “con azeyte rosado y de lirio”. 4(Si se tritura con ceniza). Otros “si triturada con mosquitos”. 5(Psilotro). Es medicamento que quita el pelo.