CAPITULO XIV

Del lamio y de sus medicinas

Aquella planta también que llamamos entre sus géneros lamió, mansa y de hojas que no pican, cura, majada con un poco de sal, a los que han recebido algún golpe. Iten a las quemaduras y lamparones, hinchazones, gota de los pies y llagas. Tiene una veta blanca1 en medio de la hoja que cura el fuego de Santantón. Algunos de los latinos destinguen los géneros en el tiempo y ansí dizen que atadas en tercianas la raíz de la hortiga del otoño, de manera que se nombren los enfermos por su proprio nombre, cuando se arranca aquella raíz y se diga qué hierba es y para quién y para cuyo hijo se saca, escriven librar a los pacientes de la enfermedad que padecen, y que lo mismo haze en las quartanas. Los mismos dizen que con la raíz de las hortigas y un poco de sal se sacan las cosas que se huvieren enclavado en el cuerpo y que se resuelven, aplicando las hojas con enxundia, los lamparones o, si estuvieren maduros, son corroídos y reciben perfecta sanidad.

EL INTERPRETE

1(Tiene una veta blanca). Esta especie de hortiga vi yo muchas vezes en Guadalupe con esta veta blanca por medio; cosa cierto de considerar no pica, aunque totalmente parece a las demás con sus hojas vetadas, harpadas, algo prolongadas y de mediano tamaño.