CAPITULO VII


De las medicinas de la demás materia de las coronas y del cardo corredor


Muy famoso es entre las plantas espinosas el cardo corredor o eryngio, nacido para remedio contra las serpientes y animales venenosos. Bévese de su raíz peso de una dragma en vino contra sus heridas y mordeduras o, si alguna vez acompaña a las tales calentura, en agua. Unctan con ellas heridas y es particularmente remedio eficaz contra las ranas y chersydros.a Heráclides, médico, le tiene por de más efecto que todos los demás contra el tóxico y acónito, cocido en caldo de ganso. Apollodoro le cueze contra los tóxicos con ranas, y los extrangeros en agua. Es duro, de muchos vástagos y ñudoso, de un cobdo en alto y algunas vezes mayor y de hojas espinosas; uno hay blanco y otro negro. La raíz es olorosa. Hay unos hortenses y otros que se nacen de suyo, en lugares ásperos y llenos de peñas, y en las riberas de la mar, aunque éstos son más duros, más negros y de hojas de apio.





a. Culebras anfibias.



EL INTERPRETE


Este cardo, que los latinos llaman erynge o eryngion, nombran por toda Hespaña cardo corredor, donde es muy ordinario. Y aunque no le he visto cultivar, podría y aun, si fuésemos más curiosos, havía de hacerse, pues es su raíz, tallo y hojas noveles de muy tierno, aromático y sabroso mantenimiento. Vese también en las costas el {eringio} marino; yo lo vi, aliende de otras partes, en Sanlúcar de Barrameda; en lo demás yo no tengo noticia o sé quién la tenga de más que destos dos géneros que tengo referidos.

TOMO V. HISTORIA NATURAL DE CAYO PLINIO SEGUNDO 2