CAPITULO I


Del cogombro silvestre y elaterio


Ya tenemos dicho ser el cogombro silvestre1 muy menor que el que se cultiva en las huertas; de éste se haze la medicina que llaman elaterio,2 exprimido el zumo de su simiente, a cuya causa si no se coge con tiempo salta, y no sin peligro de los ojos; guárdase después de cocido por espacio de una noche, el día siguiente se corta con caña. También despolvorean la simiente con ceniza para refrenar el abundancia del zumo, el cual, exprimido, se recibe en agua llovediza, y después que se va al suelo del vaso se reduce al sol en forma de trocicos para grandes provechos y uso de los hombres; sana la oscuridad y otros males de los ojos y también las llagas de los párpados. Dí zese que tocando las raízes de las vides con su zumo no allegan las aves a sus uvas. Uñeta, con sus raízes cocidas en vinagre, los pies enfermos de gota, y cura el dolor de los dientes su liquor; seca y con resina, sana los empeinesa y sarna que llaman agora el lichen,3 y los apostemas que {hay} detrás de las orejas y dientes. Y aun vuelve a las cicatrices o señales de las llagas su color, y échase el zumo de su hoja con vinagre en los oídos que padecen sor dedad.

Está el elaterio de sazón por el otoño y no hay medicina que más tiempo se conserve; comienza a estar de provecho a los tres años, y si alguno antes de tiempo comenzara a gastarle, es menester dome sus trocicos echándole en vinagre, en un vaso de barro nuevo y teniéndole a fuego manso, y éste será mejor mientras más añejo, porque ha acontecido guardarse 200 años según cuenta Teophrastho. Mata la lumbre de los candiles hasta los 50, porque la prueva del verdadero es si, allegándole a ellos, les haze echar de sí centellas arriba y abaxo primero que los apaguen. El amarillo y liso es mejor que el de color de hierba y áspero, y el que es un poco amargo créese que ayuda a concebir su simiente, atada primero que coge la tierra, y a parir si se aplicare a los lomos sin que lo entienda la muger, pero de manera que, en haviendo parido, se eche fuera luego de casa.

Los que engrandecen a este cogombro escriben ser el mejor de todos el de Arabia, y luego el de Cyrene; otros se aficionan más al de Arcadia, el cual es semejante al tornasol, entre cuyas hojas y ramos nace simiente de grandeza de una nuez, pero de forma de scor pión y cola torcida y blanca, por lo cual le llaman algunos cogombro de scorpión, y ansí es también eficacísimo contra las picaduras de los scorpiones, con la simiente y con el elaterio, y para limpiar la madre y el vientre.

La quantidad que se ha de tomar se ha de limitar, según las fuerzas, desde medio óbolo4 hasta un sólido,5 {pues} mayor peso que éste es mortal, y ansí se bebe también contra la muchedumbre de los piojos e hidropesía y unc tado con miel y azeite añejo sana la esquinancia y males de la caña del pulmón.



a. Por impétigo.



EL INTERPRETE


1(El cogombro silvestre). Llamárnosle en Castilla cogombrillo amargo.b 2(Elaterio). Medicamento era muy familiar a los antiguos. En nuestro tiempo le han quitado la vez otras medicinas más benignas de lo que los tiempos han descubierto grande copia. 3(Lichen). Qué mal sea éste diremos, con Plinto, adelante, en el libro veintiséis, aunque algunos autores entienden por él los impetígines o empeines. 4(Dos de medio óbolo). Obolo, que havemos dicho muchas vezes es seis partes de dracma, que es medio escrúpulo o diez granos, ansí que medio óbolo serán cinco gramos. 5(Hasta un sólido). Que es dracma y medio.





b. Momordica sp.

TOMO V. HISTORIA NATURAL DE CAYO PLINIO SEGUNDO 2