CAPITULO VII


De la higuera de Egipto y de Chipre


Hay, ansimismo, en Egipto muchas diversidades de árboles, que en otras partes no se hallan y, primeramente, la higuera, que por eso llaman egipcia,1 árbol semejante al moral en hoja, vista y tamaño; lleva el fructo no en los ramos, sino en el tronco, que son unos higos muy dulces sin granillos, los cuales produze en grande abundancia. Pero sájanlos con uñas o púas de hierro, porque de otra manera no maduran. Y hecho esto cógenlos al cuarto día, y nacen luego otros debaxo. Y ansí, de la misma manera, hasta siete, abundando todos los estíos en mucha leche. Nacen, ni mas ni menos, cuatro higos, aunque no los sajen, en el estío, uno tras otro, y el que sale debaxo derriba al que le precedió, antes que madure. Es la madera deste árbol diferente de las otras, y tenida por una de las más excelentes. Lanzanla luego que la cortan en el agua y desta manera la secan, porque se hunde al principio, y después se sobrea,gua, y averiguadamente chupa el agua su humedad, la cual suele humedecer y mojar todas las otras maderas. Cuando comienza a andar sobre el agua, da muestras que está de sazón.

Es en alguna manera semejante a este árbol la que llaman en Candía higuera de Chipre,2 llevando también fructo en su tronco y ramos, ya cuando se hazen gruesos. Pero ésta lleva sus pimpollos sin hoja, a manera de raízes. Su tronco es semejante al del álamo3 y las hojas a las del olmo. Arroja los higos de cuatro en cuatro y torna a echar otras tantas vezes, aunque no madura su fructo si, hendiéndole, no le sacan leche. Tiene el gusto, y lo de dentro, de higo y el tamaño de serva.



EL INTERPRETE


1(La higuera egipcia). Este es el sicómoro de Dioscórides y de los demás herbarios, árbol conocido en nuestras partes. 2(Higuera de Chipre). De ésta haze también mención Dioscórides al cabo del capítulo del sicómoro diziendo engendrarse en Chipre un árbol de diferente linage, el cual, como sea olmo, lleva hojas de sicómoro y fructo de tamaño de ciruela, aunque mucho más dulce que los sobredichos; en lo demás es semejante. Acordóse ansimismo de estas dos plantas Theophrasto en el capítulo II del libro cuarto. 3(Del álamo). De sus especies diremos en el {libro} diez y seis, donde terná su proprio lugar.

TOMO V. HISTORIA NATURAL DE CAYO PLINIO SEGUNDO 2