CAPITULO XXXV


De las polillas y mosquitos


Cría el mismo polvo, en las lanas y vestiduras, polillas, en especial si se encierra con ellas alguna araña, porque son tan sedientas que sorbiéndose toda la humidad se acrecienta la sequedad; nace la misma en las cartas.1 Llevan algunas de ellas arrastrando sus casas, como los caracoles, aunque se les esparcen los pies, y despojadas de su cobertura mueren, y si crescen hácense las que los griegos llaman chrysálidas.

Engendran los mosquitos que llaman ficarios el cabrahigo y cantáridas los gusanillos de los higos, perales, pinos, cynacanthas2 o zarzas perrunas y rosas. Tiene consigo este veneno su remedio porque se cura con sus mismas alas, las cuales, si se quitan, es mortal.

Engéndrase otro género de mosquitos de las cosas que se acedan porque se hallan en la nieve antigua, rubios3 (porque se para rubio por antigüedad) y vellosos, y en el medio de ella blancos, mas torpes y mayores.



EL INTERPRETE


1(En las cartas). Papel era que se usa va entonces, hecho del junco que llamavan papyro, como se verá adelante. 2(Cynacantha). Por ventura entendió la zarza de los escaramujos que llamamos zarza perruna, como el nombre griego lo significa, la cual tengo mostrado en otras partes ser el cynorrhodos y cynosbatos de algunos autores y también de Plinio, aunque fuese ansí que alguna vez se tomasen por otra planta. 3(Rubios). Sigo la letra de Aristóteles en el libro De animales quinto, capítulo XIX, donde aquesta de Plinio estava depravada.

TOMO V. HISTORIA NATURAL DE CAYO PLINIO SEGUNDO 2