CAPITULO XIX

Exemplos de diversas costumbres

Dízese nunca haverse reído Crasso, abuelo del otro Crasso, que mataron los parthos y, por tanto, le llamaron Agelasto,a como también otros no haver llorado y de Sócrates, esclarecido en sabiduría, haver sido siempre visto de un mismo semblante, no más alegre o más turbado. Sobresale en esto el tenor del ánimo en un rigor y severidad de dura e inflexible naturaleza, y quita las pasiones humanas, y a éstos llamaron los griegos apatheis,b tiniendo muchos dellos en su tierra y, lo que es de maravillar, autores de grande sabiduría como fueron Diógenes Cínico, Pyrrhón, Heráclito, Thimón y, éste, venido en extremo de aborrecer todo el género humano. Pero estas muestras de naturaleza depravada en muchos se ven de diversas maneras, como en Antonia, muger de Druso, que jamás escupió, y en Pomponio, poeta, consular, que nunca regoldó. Los que tienen naturalmente los huesos macizos, que son bien pocos, se llaman córneos.


EL INTERPRETE

Aunque el hombre sea naturalmente risible y perturbable, puede tanto el valor del ánimo y la costumbre, mayormente ayudando a ello la particular naturaleza de algunos, que no se haze difícil de creer que no se hayan reído ni dado muestras algunas de perturbación. El no escupir, ni regoldar y tener los huesos macizos, se podría referir a sequedad y calor, aunque en las dos cosas primeras destas tres podría también ayudar y tener lugar la costumbre.

a. άγελαστος, tétrico, severo.

b. άπάθεια, impasibilidad del ánimo.

TOMO IV. HISTORIA NATURAL DE CAYO PLINIO SEGUNDO 1