CAPITULO VI


Del HOITZTLACUATZIN o tlacuatzin espinoso, puerco espín de Nueva España


Es el HOITZTLACUATZIN animal del tamaño de un perro mediano, de color negro, con figura de tejón o de tlacuatzin , del cual toma el nombre. Está cubierto de espinas huecas, puntiagudas, de tres pulgadas de largo y muy semejantes a las espinas o púas del puerco espín, pero con algunos pelos suaves entremezclados, excepto en la cabeza, y que forman como una pelusa oscura, pero blanca en su nacimiento. Clava sus púas a los perros que lo persiguen, sin que puedan éstos sacárselas por más mañas que empleen y esfuerzos que hagan, pues se entierran cada vez más, poco a poco, hasta que perforan las entrañas por cierta fuerza innata, y hacen salir el humor natural del cuerpo causando así la corrupción del perro traspasado y perforado. Guardan los indios estas púas, y dicen que nueve de ellas, calentadas con poco fuego para que se sequen sin perder su virtud, reducidas a polvo fino y administradas con vino o agua, rompen las piedras de los riñones, limpian los conductos de la orina y la vejiga, excitan el deseo venéreo y mitigan el dolor de cabeza, para lo cual son útilísimas, pues aplicadas a la frente o a las sienes se adhieren y fijan espontáneamente y no se caen hasta que, a la manera de las sanguijuelas, llena de sangre su oquedad y evacuada así la causa del dolor, quedan los enfermos incólumes y libres de la enfermedad. Es animal digno de verse, y no es menos admirable la fuerza de sus púas; y es de ensalzarse con grandes alabanzas la sabiduría y el poder del Sumo Hacedor, que adornó este mundo con tal diversidad de cosas dotadas de tan varias virtudes naturales. Las púas son blancas y amarillas, delgadas y de tres pulgadas de largo, pero con las puntas negruzcas y muy agudas. La cola es más corta que la del tlacuatzin, pero un poco más gruesa, y desprovista de púas desde la mitad hasta el extremo. Las patas son como de quauhpezotli, pero más anchas. El hocico es como de perro, pero achatado. Tiene dos dientes arriba y dos abajo, como los de la llamada tuzan. El vientre no tiene espinas y está cubierto de pelos, así como la parte exterior de brazos y piernas. Puede domesticarse. Vive en lugares cálidos de Xonotla y Tezotzocalco, y podría vivir, según conjeturamos, en Sevilla o algún otro lugar más cálido de Andalucía, si se llevara allá. Se alimenta de frutas del tiempo y prefiere los sitios montuosos.



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HOITZTLACUATZIN


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HOITZTLACUATZIN



TOMO III. HISTORIA NATURAL DE LA NUEVA ESPAÑA 2