CAPITULO CXXXIX

Del HOEIPOCHOTLI

Es un árbol grande con hojas como de cidro de un verde oscuro por una parte y más claro por la otra, en grupos de siete en el extremo de las ramas, y flores grandes, purpúreas y hermosísimas en racimos. Es árbol hermoso, muy estimado por su sombra, su corpulencia y la belleza de sus flores, y plantado con gran esmero por los reyes mexicanos en sus huertos, principalmente en los hoaxtepecenses. El fruto es semejante al ahuácatl, pero no es comestible. Nace en climas cálidos y por tanto en la isla de Haití, donde lo llaman ceiba. Cuando abunda el rocío celeste, suele condensarse sobre este género de árboles en el llamado por los árabes maná, pero algo más duro que el nuestro y sumamente glutinoso.

TOMO II. HISTORIA NATURAL DE LA NUEVA ESPAÑA 1