La CURIQUA segunda es una hierba con raíces semejantes a las del asfódelo, pero fibrosas y pendientes de unas cuerdecillas, de donde brota un tallo único a manera de caña, cubierto de hojas largas, angostas, arundináceas y con nervaduras longitudinales. Está dotada, como lo indica su nombre, de naturaleza caliente y seca; se dice que las raíces trituradas y tomadas curan los dolores del mal gálico, y que abren, limpian y secan las erupciones del mismo. Nace en Mechoacan.
CHUCUNGUARIQUA
TOMO II. HISTORIA NATURAL DE LA NUEVA ESPAÑA 1