Aunque este árbol tomó su nombre de la eficacia para provocar la orina, se dice que la corteza del tronco o de las ramas, reducida a polvo, mitiga también la fiebre y quita las inflamaciones de los ojos, pues es de naturaleza fría y salivosa, por lo que lubrica el conducto urinario y es favorable a los ojos. Nace en lugares cálidos, como Quauhchinanco.
TOMO II. HISTORIA NATURAL DE LA NUEVA ESPAÑA 1